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Reducción de Pecho

Reducción de Pecho

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La reducción de pecho es la operación indicada si quieres acabar con aquellas molestias como dolor de espalda, cuello, irritación de la piel y problemas respiratorios causadas por un tamaño de pecho excesivo.

Olvídate de los problemas de espalda y los complejos gracias a la Reducción de Pecho en Madrid, realizada por cirujanos experimentados.

¿En qué consiste la operación de reducción de senos?

Un tamaño de pecho excesivamente grande puede ocasionar los mismos problemas estéticos y psicológicos que unas mamas demasiado pequeñas, además de problemas físicos asociados como dolor de espalda o problemas respiratorios, lo que lleva cada año a miles de mujeres a someterse a una reducción de senos.

La hipertrofia mamaria o crecimiento excesivo de los senos puede aparecer en la pubertad, debido a la hipersensibilidad a las hormonas femeninas, o en la mujer adulta, debido a un aumento del tejido graso mamario.

La reducción de senos o mamoplastia de reducción es una intervención quirúrgica que consiste en la extirpar parte de la grasa, del tejido glandular y de la piel del pecho, para que éste quede más pequeño y proporcionado con el resto del cuerpo

¿Qué pasos debes seguir para someterte a una reducción de senos?

En primer lugar, y como sucede ante cualquier operación, debes acudir a una primera visita con el cirujano en la que tras una exploración te indicará si la reducción de senos está indicada en tu caso y cuál sería la mejor técnica para abordarla.

El especialista observará aspectos como el tamaño de los senos, la altura de los pezones, la separación entre las mamas o la elasticidad de la piel.

Y una vez decidida qué técnica quirúrgica empleará y qué resultados son los esperados, te indicará las pruebas preoperatorias a las que debes someterte (analítica, electrocardiograma, etc.)

Por último, esta primera visita médica también sirve para establecer una relación de comunicación médico- paciente basada en la confianza.

Todos los cirujanos con los que trabaja ClinicPoint en Madrid cuentan con la titulación de Especialistas en Cirugía Plástica y están acreditados por la Sociedad Española de Cirugía Plástica Reparadora y Estética (SECPRE). Las intervenciones se realizan siempre en centros hospitalarios de máxima calidad.

¿Quién puede someterse a una operación de reducción de senos?

La reducción de senos está indicada para mujeres con un volumen de pecho demasiado grande, a menudo caído y con flacidez, que les ocasiona dolor de espalda y/o de cuello, irritación cutánea en la zona inferior de las mamas, problemas respiratorios y hasta deformidades óseas, tanto por el propio peso de los pechos como por la postura corporal que suelen adoptar para disimularlos (hombros hacia adelante y espalda curvada).

Y en el plano psicológico, les condiciona su vida diaria, porque no les permite hacer las actividades que desean: practicar deporte, vestir “a la moda”... En definitiva, cuando tiene un impacto negativo en su autoestima y su calidad de vida.

Mientras que en el aumento de senos la motivación principal es la estética, la operación de reducción mamaria se realiza generalmente para aliviar un problema físico.

Las pacientes que quieran someterse a una reducción de senos en Madrid deben:

- Ser mayores de edad, sus mamas deben estar completamente desarrolladas
- Gozar de estabilidad psicológica
- Ser capaces de visualizar los resultados y ser realistas con las expectativas
- No sufrir ninguna enfermedad que suponga un riesgo para la intervención.

En caso de padecer obesidad se recomienda que primero intentes perder peso ya que en algunos casos, volver al peso normal puede evitar la cirugía.

¿Cómo se realiza una reducción de senos?

Con el objetivo de reducir el tamaño del pecho para evitar las dolencias físicas y mejorar la armonía corporal, cientos de mujeres se someten cada año a una reducción de senos en Madrid.

Esta intervención se realiza bajo anestesia general y siempre en un centro hospitalario que cuente con el personal especializado y la tecnología más vanguardista para recibir la mejor atención en caso que surgiera alguna complicación. La duración es de entre dos y cuatro horas.

La mamoplastia de reducción se puede abordar con diferentes procedimientos, dependiendo de las características del pecho, pero todos ellos tienen la misma finalidad: reducir el tamaño de las mamas y elevar la areola y el pezón intentando que las cicatrices residuales sean lo más disimuladas posible. Durante la operación también puede aprovecharse, si la mujer así lo desea, para reducir el tamaño de la areola.

La técnica más común consiste en realizar 3 incisiones: alrededor de la areola, una incisión vertical hasta el surco mamario y otra horizontal siguiendo la forma del pecho por su parte inferior, como si de una T invertida se tratara. Se extrae el exceso de tejido glandular, la grasa y la piel sobrantes y a continuación, la areola y el pezón se colocan a una altura más elevada.

En mujeres jóvenes y/o con buena elasticidad en la piel puede ser suficiente con la incisión vertical, sin tener que realizar el corte horizontal en el surco submamario.

Normalmente los pezones permanecen sujetos a los vasos sanguíneos y nervios durante toda la intervención. En el caso que las mamas fueran excesivamente grandes o pendulares tendría que ser extraídos completamente y colocados nuevamente.

Una vez finalizada la operación deberá permanecer ingresada con un vendaje compresivo  y unos tubos de drenaje entre uno y  tres días antes de recibir el alta. 

¿Cómo es el postoperatorio tras una reducción de senos?

Tres o cuatro días después de la intervención ya te encontrarás físicamente mucho mejor y podrás retomar tu vida cotidiana casi con total normalidad evitando movimientos bruscos, cargar peso, etc. El dolor se puede controlar perfectamente con la medicación prescrita por el especialista.

El vendaje con el que sales del hospital se retira a la semana aproximadamente y se empieza a usar el sujetador postquirúrgico siguiendo las recomendaciones del cirujano. Y entre los días 10 y 14 se quitan los puntos.

Entre las molestias más frecuentes está el ardor o picor en la zona de los pezones que puede alargarse hasta tres semanas. Durante la primera menstruación después de la reducción de senos es muy posible que las mamas se hinchen y experimentes algunas molestias.

También es normal que aparezcan alteraciones temporales en la sensibilidad de los pezones. Raramente, la disminución de la sensibilidad es permanente.

Aproximadamente entre dos y tres semanas después de la reducción mamaria podrás incorporarte al trabajo siempre y cuando el desempeño de tus tareas no suponga un riesgo para la completa recuperación. Debes evitar el contacto físico intenso durante el primer mes.

Por lo general, no se debe aplicar ni hielo ni calor en los senos, excepto en casos en los que el médico lo haya recomendado expresamente.

Respecto a las cicatrices, hay que tener en cuenta que su aspecto definitivo debe considerarse al año de la operación. Existen cremas regeneradoras e hidratantes y productos como geles, parches o láminas a base de silicona que pueden ayudar a mejorar su aspecto. Los masajes también pueden resultar útiles, pero siempre siguiendo las indicaciones médicas. Y recuerda que es fundamental proteger las cicatrices del sol.

Dudas frecuentes sobre la reducción de senos

Las cicatrices tras una mamoplastia de reducción

Las cicatrices son uno de los aspectos que más preocupa a las mujeres antes de someterse a la reducción de senos ya que, a diferencia de la mamoplastia de aumento, en este caso sí que serán visibles aunque el cirujano intentará que sean lo más disimuladas posible.

La cicatriz que queda alrededor de la areola es prácticamente invisible ya que se sitúa en la misma línea en la que la piel cambia de color.

La cicatriz horizontal, al realizarse en el surco submamario pasa completamente desapercibida.

Finalmente, la cicatriz vertical que une las dos anteriores es la que más visible puede resultar al principio pero la constancia en los tratamientos complementarios ayudará a que su aspecto mejore más rápidamente quedando difuminada con el paso del tiempo.

¿La reducción de senos puede interferir en la lactancia?

En el caso que sea necesario eliminar una cantidad muy importante de tejido mamario, el médico te advertirá del riesgo de que la lactancia pueda verse afectada o impedida en el caso que en el futuro desees tener hijos y dar el pecho. Si te preocupa este tema, debes plantearlo en la primera visita con el cirujano.

ClinicPoint pone a tu disposición la operación de reducción de senos en Madrid con excelentes cirujanos plásticos con amplia experiencia en este campo. No dudes en acudir a la primera visita para resolver tus dudas y programar todos los pasos a seguir para someterte a esta operación de pecho con todas las garantías y con la seguridad de estar en las mejores manos.