Los ronquidos son tan molestos para la persona que los sufre como para quien le escucha, ya que en ambos casos no pueden descansar bien por las noches. Y no solo se trata de dormir bien, sino que los ronquidos pueden acabar en apnea del sueño, una obstrucción de las vías respiratorias durante varios segundos, y agravar otros problemas de salud. No descansar bien durante la noche a largo plazo se traduce en: dolores de cabeza, hipertensión pulmonar, problemas cardiacos, entre otros. Es más, cuando se padece alguna cardiopatía los ronquidos y las apneas pueden empeorarla. De ahí que en los últimos años se haya avanzado mucho en los tratamientos antironquidos. Y es que un buen descanso es sinónimo de una buena salud.

¿Por qué se producen los ronquidos?

Las principales causas del ronquido son:
  • El sobrepeso o la obesidad.
  • La acumulación de grasa alrededor de la faringe (lo que comúnmente llamamos papada).
  • La congestión nasal o cualquier obstrucción en la nariz como los pólipos nasales, ya que nos obliga a respirar por la boca y esto aumenta las probabilidades de roncar.
  • La inflamación de las amígdalas.
  • El crecimiento de vegetaciones o adenoides.
  • Las alergias, ya que provocan un aumento en el tamaño de los cornetes y por tanto, un estrechamiento de la vía respiratoria.
  • Una desviación en el tabique nasal.
  • Determinados fármacos como los sedantes, ansiolíticos, etc. que actúan relajando toda la musculatura.

Diferencias entre ronquido y apnea

Los ronquidos son respiraciones ruidosas provocadas por una vibración en la garganta y que sucede durante el sueño. En cambio la apnea es una pausa o interrupción de la respiración que puede durar hasta 10 segundos y repetirse entre 30 y 300 veces durante la noche. Con los ronquidos la respiración no se interrumpe ni la persona llega a despertarse. En un episodio de apnea la persona puede terminar por hacer algún movimiento corporal y despertarse, aunque no siempre sucede. La apnea va acompañada de ronquidos ruidosos. Las personas con sobrepeso, antecedentes familiares, de sexo masculino y con vías respiratorias pequeñas tienen un mayor riesgo de padecer apnea. Ni los ronquidos ni la apnea deben pasarse por alto. Hay que acudir al especialista ya que influye en el control de otras patologías con las que está relacionada, como la hipertensión, la insuficiencia cardiaca o la diabetes.

¿Qué medico trata los ronquidos?

El profesional que trata los ronquidos es el otorrinolaringólogo. Para averiguar localizar el motivo que provoca los ronquidos es necesaria una exploración completa de la nariz, la boca, el paladar, la garganta y el cuello. Si con esto no es suficiente se sospecha de apnea obstructiva del sueño el especialista puede solicitar un TAC, una polisomnografía, una oximetría, etc.

¿Qué se puede hacer para evitar los ronquidos?

Las principales medidas que puedes adoptar para evitar los ronquidos son:
  • Adelgazar. Si se padece obesidad o sobrepeso, bajar de peso es un tratamiento eficaz contra los ronquidos.
  • Evitar dormir boca arriba. Es mejor dormir de costado y utilizar una almohada alta, o incluso dos, puede mejorar el problema.
  • Evitar el alcohol y el tabaco, así como los tranquilizantes, sedantes, antihistamínicos, etc. Si estás tomando estos u otros medicamentos, consulta con tu médico.
  • Prueba las gotas para despejar la nariz o las tiras nasales para abrir las vías nasales y respirar mejor.
  • Aprender a mejorar la función respiratoria. Se imparten talleres para adquirir conocimientos y técnicas que permiten un cambio de hábitos en los mecanismos de la respiración y mejorar la oxigenación durante el sueño.
  • Recurrir a tratamientos antironquidos especializados

¿Existe algún tratamiento antironquidos?

Existen múltiples tratamientos antironquidos. Uno de los más utilizado entre las personas con apnea del sueño es la CPAP, un dispositivo que proporciona un flujo continuo de aire a través de una mascarilla conectada a una máquina, para evitar el cierre de las vías respiratorias durante el sueño. Por otro lado, están los tratamientos antironquidos convencionales que requieren una operación. En primer lugar, el otorrinolaringólogo localiza la zona en la que se están originando los ronquidos. En función de la zona y de la patología a tratar, hay distintas intervenciones quirúrgicas:
  • La adenoidectomía o extirpación de adenoides. Los adenoides o vegetaciones son el crecimiento excesivo de las glándulas situadas en la parte posterior de la nariz.
  • La amigdalectomía o extirpación de las amígdalas. Hay dos posibilidades, reducir su tamaño o eliminarlas completamente.
  • La septoplastia o cirugía del tabique nasal para mejorar la respiración.
  • La cirugía endoscópica nasosinusal para procedimientos mínimamente invasivos en las fosas nasales y senos paranasales.
  • La cirugía de cornetes. En el interior de las fosas nasales se encuentran unas estructuras alargadas y carnosas denominadas cornetes o carnots En algunos casos crecen más de lo normal y hay que extraerlos provocan dificultades para respirar por la nariz.
  • Si los ronquidos se producen por algún problema en la zona de la faringe las intervenciones quirúrgicas se realizan con la finalidad de ampliar el espacio nasofaríngeo y orofaríngeo para mejorar el flujo aéreo.
  • En los casos severos de apnea, se puede recurrir a una traqueotomía, la obertura permanente de la tráquea.
En los últimos años, el tratamiento de los ronquidos mediante láser ha ido ganando terreno ya que es una de las opciones más seguras y efectivas. El Láser Fotona es un novedoso tratamiento para eliminar los ronquidos y mejorar la calidad del sueño, consiste en la aplicación de calor para retraer de úvula (la campanilla) y minimizar tanto los ronquidos como los efectos de la apnea del sueño. El láser no corta los tejidos sino que los calienta a 62 grados, la temperatura de coagulación.

El calor actúa estimulando el colágeno y la elastina de los tejidos para que se tensen y se retraigan y, de esta manera se consigue liberar espacio en la vía aérea para poder respirar mejor. El tratamiento tiene una duración de entre un año y medios y dos años. Transcurrido este tiempo, la campanilla vuelve a agrandarse progresivamente. El Láser Fotona es un procedimiento no invasivo, que no requiere ni hospitalización ni cuidados especiales posteriores y la recuperación es inmediata. Cada sesión dura unos 8 minutos y basta una única sesión para conseguir una notable mejoría. El número de ronquidos y el volumen pueden llegar a reducirse en un 70-80 por ciento.

¿Es posible eliminar los ronquidos para siempre?

Tanto con la cirugía como con las medidas higiénicos sanitarias que hemos mencionado es posible, en muchos casos, dejar de roncar definitivamente. Sin embargo, será el especialista quien una vez determinada la causa del ronquido o de la apnea pueda determinar si es posible o no eliminar los ronquidos para siempre y qué técnica emplear para conseguirlo.