Ya estamos en verano, la temperatura sube, los días se alargan y nos guasta estar al aire libre, ligeros de ropa, pero sobretodo bronceados.

Y aquí es donde empiezan los problemas. Sabemos de sobra que los rayos solares en exceso son perjudiciales para nuestra piel. Por ello debemos de tener especial cuidado de nuestro cuerpo y protegernos del sol aunque nuestra piel sea blanca, negra o de fácil bronceado. Nadie se libra de los rayos ultravioleta que nuestro amigo el sol irradia sin pudor, lo notes o no en tu piel, ésta se va impregnando de dicha radicación solar, y eso a lo largo de los años nos puede pasar factura.

¿Cómo afecta el sol a nuestra piel?

Lunares, verrugas, pecas… debemos vigilarlas de cerca.

Desde que nacemos y a medida que vamos creciendo, aparecen lunares, pecas y verrugas en nuestra piel, algunas personas son más propensas a desarrollar estas afecciones dérmicas que otras, pero todos, absolutamente todos, debemos tener un especial cuidado y ver los cambios que se pudieran ocasionar en nuestra dermis.

Ten en cuenta que casi el 90% de los melanomas que pudieran surgir son por culpa de exposiciones solares agresivas, además, estas exposiciones son acumulativas, o sea, nuestra piel tiene memoria, y una inocente pero dolorosa quemadura en la playa hace 15 años, puede estar repercutiendo ahora en tu cuerpo.

¿Qué es un melanoma?

Los melanomas son lunares malignos (cancerígenos) que deben ser estudiados y extirpados cuantos antes. Por regla general si se cogen a tiempo con extirparlos ya es suficiente, pero como todo si se deja pasar, a la larga, puede repercutir severamente al resto del organismo causando metástasis, en el peor de los casos.

Lunares sospechosos: 

Generalmente los lunares suelen tener una amplitud de pocos milímetros. Normalmente si pasa de 6 milímetros se considera un lunar susceptible de ser vigilado por dermatólogo especialista. Lo mismo sucede si cambian de color, grosor y/o presentan distintas tonalidades.

En este artículo te damos 5 consejos para revisar tus lunares, recuerda que en autoexamen de tu cuerpo como mínimo cada trimestre ayuadará que lleves un control sobe los cambios de tu piel. 

¿Qué debemos tener en cuenta?

  • Asimetría: La mayoría de los lunares son redondos u ovalados pero tiene una simetría conjunta. Es conveniente que si tienes un lunar de forma muy asimétrica entre sí te lo examines.
  • Color: Los lunares de colores muy oscuros casi negros o incluso rojizos deben ser explorados por un especialista. Es conveniente, además, que nos fijemos en si cambia de color o de forma.
  • Grosor: Generalmente debemos tener especial cuidado con aquellos lunares de más de 6 milímetros. Aunque no es una ciencia exacta pueden existir lunares sospechosos que sean más pequeños. 
  • Controlar la evolución: Este es un aspecto muy importante a tener en cuenta. En caso de tener un lunar sospechoso fíjate en si tiene algún cambio en pocos meses o en un año. Si ves cambios debes examinártelo para comprobar que todo va bien. 

Es importante añadir que la espalda es uno de los lugares que no solemos mirarnos y una de las zonas donde más aparecen los lunares sospachosos, por lo que siempre es recomendable que alguien pueda controlarte ese lunar del que sospechas.

Extirpación de lunares:

En ocasiones hay algún lunar que nos parece poco atractivo o se encuentra en alguna zona que nos compromete estéticamente. Si te molesta siempre puedes acudir a un dermatólogo para que te elimine ese lunar o verruga, pero recuerda que siempre deberá ser analizado por un laboratorio para determinar que el tejido no es canceroso.

¿Y qué hay de las verrugas?

Las verrugas o queratosis son pequeñas protuberancias benignas que aparecen con los años y por las exposiciones solares. Son lesiones dérmicas, inocuas para el organismo pero algunas pueden llegar a ser muy antiestéticas, por ello, la extirpación de verrugas es una práctica que la puede hacer el dermatólogo sin problema y de forma ambulatoria. Siempre se llevará a analizar el tejido para descartar cualquier afección que pudiera existir.

Tipos de verrugas:

  • Verruga común: generalmente aparece en las manos.
  • Verrugas planas: lesiones pequeñas, lisas, aparecen en cara, en el dorso de las manos o piernas.
  • Verrugas seborreicas: se forman por la acumulación de sebo, son alargadas y pueden ir creciendo y cambiando de forma. Suelen salir en partes como el cuello y cara. La inmensa mayoría no son problemáticas pero si muy antiestéticas.
  • Condilomas o verrugas genitales. A estas lesiones hay que tenerle especial atención. Son provocadas por el Virus del Papiloma Humano y se contagian generalmente por vía sexual. Es importante que se les preste la debida atención puesto que en algunos casos están vinculados a algún tipo de cáncer genital.

Cómo son los tratamientos para eliminar verrugas y lunares:

La mayoría de las extirpaciones se hacen mediante cirugías menores que se realizan de forma ambulatoria con la técnica del raspado. Con un bisturí cortan la verruga o lunar y se raspa la superficie para eliminar los restos.

También existe la crioterapia: que consiste en la eliminación de la lesión por congelación del tejido, de modo que en unos días se seca y cae por si sola.
Tratamientos con láser: El láser CO2 o el Yag también son métodos utilizados para la extirpación de dichas lesiones.

Nuestro consejo:

Cualquier lesión o protuberancia dérmica sea lunar, peca, mancha, verruga, etc. Debe ser controlada y autoexaminada (sin obsesionarse por ello). En el caso de cambios de color o grosor es importante acudir al dermatólogo para realizarse una inspección o estudio de lunares para controlar que todo está bien y descartar cualquier anomalía dérmica. Recuerda que el sol es uno de los grandes enemigos en cuanto se trata de lunares, verrugas y manchas.
Te dejamos 10 consejos para que disfrutes del sol en verano evitando manchas y lunares. 

¡Protégete de sol y disfruta de él con cabeza y sin abusar! 



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